LOLA FLORES: UNA VIDA ATRAVESADA POR LA PASIÓN LA POBREZA Y LOS EXCESOS

Sus abuelos paternos eran de Zamora y su familia materna tenía origen santanderino, por lo que iban a menudo a los dos lugares en las asueto de verano y Semana Santa. Lola fue velada y enterrada con una mantilla blanca de Carmen Sevilla en su cabeza.

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Abundante mariquita, que me quieren baza. Lola sedujo inmediatamente a una estrella del equipo rival, el Atlético de Madrid, y el jugador enloqueció hasta tal punto, que el director técnico se reunió con ella para acusarla del bajo rendimiento del goleador. Cuando ella llegó, encontró que en la mesa estaba Aristóteles Onassis, pero Lola estaba ilusionada con el gran director italiano. Sin embargo, el que le ofrecieran películas musicales y no la consideraran como actriz fue una espina que siempre tuvo clavada. En mi casa suena el teléfono cada tres minutos y la mayoría de las veces es gente que necesita algo. El novio de Lola, Enrique Ruano, compañero de autorización, fallece en un interrogatorio en los calabozos de la gendarme franquista. Mientras tanto, otra diva del cine hollywoodense, la extraordinaria Ava Gardner, mujer de Frank Sinatra, declaraba al llegar a Madrid: "Yo quisiera ser Lola Flores". E inevitablemente tuvieron su propia historia.

Lola Flores - Limosna de amores - Fuente: YouTube

Empero como suele darse en pasiones tan intensas, las peleas eran tan corrientes como hacer el amor y se corría el rumor de que él había comenzado a pegarle. Cuando llegó a La Habana, compartió decorado con el astro francés Maurice Chevalier y también una apartamento de hotel, aunque no llegaron a concretar nada, porque después de que Chevalier le sirviera varias copas de champagne, ella se descompuso. Tras la asesinato de Franco, hubo quienes acusaron a Lola y a otras populares estrellas de haber simpatizado con el gobierno del autoritario. En un momento que me retiré a dormir, me avisaron que había muerto.

Lola Flores: una vida atravesada por la pasión, la pobreza y los excesos - LA NACION

De esa experiencia, le quedaría un dolor, su primer aborto. En el baño, a punto de desmayarse de sueño, se fabricó con su pollera un cinturón de castidad para asegurarse de que él no la iba a violar. Cuando el bastaje preguntó a ella qué quería, Lola respondió a viva voz: "Quiero cebolla cruda, que es lo mejor para el pelo". Después fueron a París y cuando la pasión con el jugador se iba apagando, apareció en escena un astro de Hollywood, Gary Cooper, quien todas las noches la visitaba en el camarín del teatro Olimpia. Ella es una de las supervivientes en la matanza de Atocha, pero era una muerta en vida. En un comilona al mediodía, Lola declaró a la prensa: "Yo creo que seré feliz, me caso con un artista y tenemos la misma sensibilidad. El cantante, ligón empedernido y experto en situaciones comprometidas, le dijo: "No es lo que piensa amigo, es que a estas potrancas jerezanas, hay que domarlas antes de salir a escena".

En ese marco, es que Lola, cansada de ver sufrir a sus padres, accede a los deseos de su obsesivo aficionado, como relatamos en el comienzo. Yo te conozco muy perfectamente y no te vas a reír de mí como lo has hecho con otros. Yo no soy de ir a misa, porque me cuentan muchas cosas que yo ya sé del Evangelio, pero creo en alguien superior y a él le pido que les dé salud, que los ayude y que sigamos juntos Mientras un poeta le dedicaba esta locución, en toda España proyectaban su nueva película y la familia concurría masivamente a los cines. Llegó a decirle que su madre no la había parido y que era hija de una gitana. Comerciantes leoneses Javier Padilla recrea en su álbum el origen leonés de la protagonista de su investigación.

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