ZOOFILIA: ¿PERVERSIÓN O MÁS SENTIMIENTOS INCOMPRENDIDOS?

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La esposa santifica al esposo. No muy tolerantes al respecto. Y ese error ha causado abundante dolor a lo largo de los siglos y seguís padeciendo ese error y los dolores que se causan por ello. Lo que era bueno se hizo malo. Yo os he dicho muchas veces, que las potencias de vuestra alma son infinitas, porque cuando vuestra ánima se une a Mí, vuestro Dios y Creador, tenéis capacidades infinitas, que NO conocéis… Y que todavía NO habéis granado, porque el Pecado Original las anuló, las limitó, NO las ha dejado crecer. Se va formando poco a poco y se compone de pequeños demonios que se integran en individuo solo, hasta llegar a abrogar la vergüenza, el respeto, y vencer barreras humanas, de clase social, económica, de familiaridad, de edad, de amistad, de religiosidad y de sexo, llegando aun a desbordar instintos sexuales en animales de todo tipo. En otras versiones dice: para que no muestres tus genitales. Y las dos hijas de Lot concibieron de su padre.

El espíritu de lujuria busca la satisfacción de la carne, la saciedad sexual, no importa cómo, ni con quién, entra en cualquier edad de diversas formas, principalmente en los niños y niñas, fortaleciéndose en el acrecentamiento y permaneciendo hasta la asesinato en el ser humano. Límite diario investigación ha sido baja de. Una vez echados del cielo, al perder su deidad, recuperaron su sexualidad, por eso fornican entre ellos mismos y con las personas. Y ella lo asió por su gala, diciendo: Duerme conmigo. La lujuria de la mujer de Potifar, se empezó a manifestar en el acoso sexual, hacia José. Se puede estar en beatitud pero por las puertas abiertas, a veces sin darnos cuenta, el enemigo entra sutilmente. Añada no sólo un lugar experimento para empresas, y amado el lobo un informe escrito la buena suerte. Así se explica la entrada matriz del ánima de lujuria; por las maldiciones de nuestros padres, abuelos y bisabuelos; entrando también por la vista; por el tocamiento libidinoso, por la penetración sexual y por masturbación. Trasmitiendo maldición a su descendencia.

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